domingo, 17 de diciembre de 2023

Mc 4,34

 y no se lo exponía más que en parábolas; pero a sus propios discípulos se lo explicaba todo aparte.

Insiste Mc en que Jesús, para exponer el mensaje del Reino a la multitud, utilizaba solamente un lenguaje figurado, dado el obstáculo que les imposibilitaba la comprensión. La misma incomprensión aparece en los discípulos, pero Jesús no se resigna a que éstos no lleguen a entender; para vencer su incomprensión les ofrece una explicación en privado. Esto muestra, por una parte, el amor de Jesús por ellos (3,13: <<a los que él quería>>), y por otra, la inmadurez de los discípulos, quienes, aunque se les ha comunicado el secreto del Reino (4,11), no lo penetran ni lo hacen suyo, y por eso no comprenden el sentido de las parábolas (4,13).

La expresión <<sus propios discípulos>> designa a los seguidores procedentes del judaísmo, según el texto de Is 54,13: <<Todos tus hijos (los de Jerusalén) serán discípulos de Dios>>. Es un caso más de la transferencia de funciones divinas a Jesús.

La explicación a sus discípulos se las da Jesús <<aparte>>. Es la primera vez que aparece esta locución (siete veces en Mc), que, a partir de este pasaje, alude siempre a la falta de comprensión de los discípulos.

Hay que notar que de los dos grupos de seguidores mencionados en 4,10, <<los Doce>>, que se identifica con los discípulos, y <<los que estaban en torno a él>>, solamente los primeros reciben una explicación particular de Jesús.

Al principio, aunque conocían el secreto del Reino (4,11), los dos grupos compartían la misma incomprensión y no entendían por qué Jesús usaba parábolas para hablar a la multitud (4,10). No entendieron la parábola del sembrador (4,13), porque no esperaban que el mensaje exigiese una disposición interna.

Una vez que Jesús les aclaró este punto (4,13-20), habrían debido estar capacitados para entender por sí mismos las parábolas del Reino (4,26-32). A pesar de eso, uno de los grupos, el de los discípulos/los Doce, no las entiende (cf. 4,13: <<¿Cómo vais a entender ninguna de las demás?>>), necesita que Jesús se las explique. Esto indica que los discípulos no captan el secreto del Reino porque su disposición no es la correcta.

Según 4,10, fueron los Doce los que tomaron la iniciativa de preguntar a Jesús; eran ellos primariamente los que no comprendían y arrastraron consigo al grupo no israelita. Éste, sin embargo, una vez escuchada la explicación de la parábola (4,13-20), no recibe ulteriores explicaciones; Mc indica así que este grupo, liberándose de la dependencia de los Doce, ha asimilado el secreto del Reino y entiende por sí mismo las parábolas. Los discípulos, en cambio, siguen sin entender, por estar aún apegados a las categorías nacionalistas del judaísmo. Se encuentran prácticamente al nivel de <<los de fuera>> (4,11).

LA BIBLIA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

APÉNDICES - MARCOS

El final abrupto de Mc y la omisión de toda aparición del Resucitado a sus discípulos dio pie, ya en el siglo II, a la adición de apéndices ...