Y siguió diciéndoles: <<¿Acaso se trae la lámpara para meterla debajo del perol o debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero? Porque si algo está escondido es sólo para que se manifieste, y si algo se ha ocultado es solamente para que salga a la luz>>.
Con la comparación doméstica de la lámpara o candil ilustra Jesús la futura misión de sus seguidores. Él no pretende formar un círculo esotérico de iniciados ni hay entre los suyos algunos privilegiados que posean una ciencia negada a los demás. Su mensaje, que formula el secreto del Reino, está destinado a todo hombre. El amor universal de Dios debe ser universalmente conocido.
Por el momento, dados los prejuicios de la multitud, Jesús ha hablado en parábolas; pero esta táctica es ocasional. Misión de sus seguidores será proclamarlo para que otros lo escuchen como ellos lo han oído de Jesús.
El mensaje, comparado antes a una semilla, se compara ahora a una lámpara que se trae para que ilumine a todos. Sería irracional esconder la luz. <<Meter la lámpara debajo del perol>> o <<debajo de la cama>> significa ocultarla, impedir que ilumine. Puede haber una alusión a Sal 119,105: <<Lámpara para mis pies es tu palabra y luz para mis sendas>>. El salmista se refería a la ley de Moisés, de la que el salmo entero es un panegírico; Jesús sustituye la palabra de la Ley por la suya propia, el mensaje del amor universal de Dios a los hombres y la comunicación de su Espíritu.
Jesús insiste en la propagación del mensaje, añadiendo dos dichos casi equivalentes. El primero, estático, <<está escondido>>, puede referirse a la novedad del mensaje respecto al AT, donde el amor universal de Dios a la humanidad, en pie de igualdad con Israel, no se había revelado; el segundo, dinámico, <<se ha ocultado>> puede aludir a la táctica de Jesús, que no ha propuesto abiertamente a la multitud el secreto del Reino. Pero, una vez revelado, no puede ser ocultado de nuevo: no se puede transigir con la mentalidad particularista; hay que presentar el rostro del verdadero Dios.
Las dos expresiones son casi equivalentes: <<se manifieste>> y <<salga a la luz>> (lit. <<llegue a [ser] público>>), desarrollan la idea anterior de <<poner en el candelero>>, subrayando la necesidad de la misión. La luz/mensaje tiene su itinerario hacia la plena visibilidad, que no debe frustrarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario