martes, 5 de marzo de 2024

Mc 8,23b

 ...le echó saliva en los ojos, le aplicó las manos y le preguntó: <<¿Ves algo?>>

Como en el caso del sordo (7,33b), la acción de Jesús con el incapacitado va mucho más allá de lo que le habían pedido los portadores (v. 22b: <<que lo tocase>>). Esto indica que la solución del problema era mucho más ardua de lo que ellos habían imaginado.

También con el ciego usa Jesús la saliva, vehículo de la fuerza vital, de cuyas propiedades curativas se ha hablado a propósito del sordo (7,33 Lect.); se notaba también allí que, según la concepción judía de aquel tiempo, la saliva era <<aliento condensado>> y que, por tanto, es apta para simbolizar el Espíritu de Jesús.

Jesús transmite su Espíritu al ciego para hacerle posible la visión. Al mismo tiempo le aplica las manos, contacto directo que expresa la transmisión de energía/vida. El Espíritu (saliva) permite distinguir lo que es de Dios de lo que no lo es. La fuerza de vida (aplicación de manos) hace posible actuar conforme a la nueva visión.

El término que usa aquí Mc para <<ojos>> (gr. ommata) no es el mismo que empleará en el v. 25 /gr. ophthalmoi). El primer término, que puede traducirse por <<ojo>>, <<visión>>, <<mirada>>, <<vista>>, se utilizaba, más que para designar el órgano, en sentido figurado, y era frecuente en poesía. Al usarlo aquí Mc apunta a la visión interior, al modo de pensar del ciego/discípulos.

Después de su acción, Jesús pregunta al ciego/discípulos si ve algo. Con ello parece incluso insinuar que duda incluso de que vea.

LA BIBLIA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

APÉNDICES - MARCOS

El final abrupto de Mc y la omisión de toda aparición del Resucitado a sus discípulos dio pie, ya en el siglo II, a la adición de apéndices ...